Aprovechando unos sacos de abono, hemos alimentado la tierra para hacerla más productiva para la siguiente temporada y para los cultivos que se avecinan. Además hemos añadido hojas de los árboles de nuestro patio al compost para poder seguir enriqueciendo nuestro estrato.
Para hacer este trabajo hemos tenido que apartar las tuberías que riegan nuestro huerto por goteo, y que una vez sembrado iremos colocando de nuevo.